La Voz

aerial photography of mountain

Hola Binyan Olam

Esta semana es el reencuentro entre Yaacov y Esav. Yaacov regresa a Israel después de pasar 20 años en Jaran en casa de su suegro.

Esav, que le tiene odio por haberle quitado las Berajot, sale a su encuentro con 400 hombres para matarlo. Si tanto odio le tenía, porque no fue hasta Jaran (que no era tan lejos) a matarlo?

Vemos que todo el poder de las bendiciones de Itzjak tenía que ver con la Tierra de Israel, mientras Yaacov está afuera, no hay peligro. Solo cuando quiere volver, es cuando Esav se prepara para la guerra.

Este patrón lo vemos a lo largo de la historia. No solo entre Esav y Yaacov, sino que con sus descendientes pasó lo mismo:

Cuando el Pueblo de Israel salió de Egipto hacia la Tierra de Israel, el primero que sale a su encuentro en el desierto, es Amalek, descendiente de Esav. Y también en tiempos modernos, los alemanes, que según el Gaón de Vilna (23 de abril 1720-9 de octubre 1797) son descendientes de Amalek, salen a destruir al Pueblo de Israel justamente antes de su regreso a la Tierra Prometida.

La Tora dice que cuando la voz de Yaacov se escuche, o sea por medio de su estudio y su rezo, las manos de Esav, o sea, su fuerza física, no tendrá poder. Pero si la voz de Yaacov se debilita, entonces las manos de Esav se fortalecen.

Durante siglos hemos sobrevivido gracias a la voz de Yaacov, inclusive sin ejércitos ni fuerza física, esa es nuestra herencia para todas las generaciones.

SHABAT SHALOM!!!!!

Soly Firman